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Hablemos del miedo

Hablemos del miedo (segunda parte)

En la segunda parte de Hablemos del miedo, seguiremos  profundizando más en el tema del miedo al dentista, así como también, trataremos en esta y posteriores entregas, detalles importantes para poder atender este tipo de emociones.

Hablemos del miedo  (segunda parte)

Como se explicó en la cápsula anterior: HABLEMOS DEL MIEDO, el miedo es una alarma, que nos ayuda a prevenir un peligro y la ansiedad es una respuesta subjetiva, porque cada persona la percibe de forma distinta.

En esto influyen de manera importante los pensamientos distorsionados o irracionales que la persona tenga, esto significa por ejemplo que si de niño usted tuvo una mala experiencia con el dentista que le atendió, es posible que de grande exagere ese temor y se imagine que va a sufrir mucho al visitar a su dentista, siendo un pensamiento distorsionado.

Para mejorar esto debe primero reconocer que tuvo un evento traumático de niño, que le generó posiblemente pánico al sentir mucha ansiedad, y que tiene un pensamiento irracional, porque si lo pensamos bien su dentista lo que busca es ayudarle a mejorar su salud dental.

Existen también los pensamientos automáticos que impiden que usted se sienta a gusto en el consultorio de su dentista, son esos que le llegan de inmediato, como una flecha, algo como esto: odontólogo = ataque de pánico. Quiere decir que, cada vez que intente hacer una cita con el dentista va a asociarlo con ese pánico que le produce el pensamiento automático.

De esta forma, aparecen de pronto una serie de síntomas característicos de la ansiedad, los físicos, pueden estar relacionados con temblores, sudoración excesiva, opresión en el pecho, náuseas, taquicardia, trastornos digestivos, otros, los psicológicos como sensación de vacío, deseos de huir, temor a perder el control, inquietud, otros, de conducta podrían ser como, incapacidad para estar quieto, impulsividad, o bien rigidez en el cuerpo, movimientos torpes, expresiones faciales de susto o nerviosismo.

Los síntomas cognitivos o del pensamiento,  son como problemas de atención, concentración y memoria, confusión y lo explicado de los pensamientos distorsionados y automáticos. También existen síntomas sociales como incapacidad para relacionarse con otras personas, temor excesivo a hablar, preguntar, bloquearse e irritabilidad.

Así que, si usted quiere eliminar ese pánico que le produce ir al dentista, o realizar cualquier actividad en su vida diaria, primero empiece por identificar esos pensamientos que le impiden hacerlo con toda tranquilidad y cámbielos. Y reconozca que, si no puede dominarlos, necesita ayuda profesional de un psicólogo.

Continuaremos con hablemos del miedo ( tercera parte)

Psicóloga María Salicetti Oviedo
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Odontóloga General monica@dramonicagomez.com Tel: (506) 8419-4936 Soy la Dra. Mónica Gómez, cirujana dentista pero para la mayoría de mis amigos soy Mó.

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